¿Cómo mantener tus almohadas limpias y frescas? Guía completa de cuidado y mantenimiento

Contar con almohadas limpias y frescas es clave para un descanso reparador. La limpieza adecuada de las almohadas, incluyendo el cuidado de almohadas viscoelásticas, no solo prolonga su vida útil, sino que contribuye a un espacio saludable, libre de ácaros y alérgenos. Aquí encontrarás la frecuencia ideal para lavarlas, los mejores métodos y algunos trucos para que tus accesorios de cama se mantengan impecables.

Frecuencia recomendada para lavar las almohadas

La acumulación de sudor, polvo y ácaros puede convertir las almohadas sucias en un problema para el descanso. Una limpieza profunda para las almohadas es ideal cada tres a seis meses y las fundas semanalmente para mantener la frescura.

Métodos efectivos para lavar almohadas

Cada tipo de almohada requiere un método particular:

• Fibra y algodón. Lava dos almohadas en la lavadora al mismo tiempo para balancear el peso. Utiliza un ciclo suave con detergente suave y agua tibia, como si fueran prendas delicadas.
• Almohadas viscoelásticas o de espuma. No se recomienda lavarlas en máquina. En su lugar, haz una limpieza superficial con agua limpia, un paño húmedo, y jabón líquido o vinagre blanco, evitando la humedad excesiva.

*Truco Sognare. Agregar bicarbonato de sodio entre lavados ayuda a mantener una almohada fresca y sin olores.

Secado adecuado para evitar moho y malos olores

Un secado completo previene el moho. Las almohadas de fibra pueden secarse al aire libre o en secadora a baja temperatura. Agrega pelotas de lana para conservar su forma. En el caso de la almohada viscoelástica, déjala secar en un lugar ventilado, evitando el sol directo. Usar fundas protectoras o impermeables ayuda a proteger la almohada de manchas y extiende su frescura. Lava la funda semanalmente para prevenir la acumulación de polvo y alérgenos, lo que además mantiene una cama libre de bacterias y olores.

Consejos para mantener las almohadas frescas entre lavados

Además de lavarlas periódicamente, ventilar la cama diariamente y espolvorear bicarbonato sobre la superficie de la almohada, dejándolo actuar unos minutos antes de aspirarlo, ayuda a neutralizar olores y humedad, así como dejar tus almohadas blancas. Además de lavarlas periódicamente, ventilar la cama diariamente y espolvorear bicarbonato sobre la superficie de la almohada, dejándolo actuar unos minutos antes de aspirarlo, ayuda a neutralizar olores y humedad, y mantener tus almohadas blancas. También puedes sacarle partido a la luz solar exponiéndolas unas horas de vez en cuando, ya que el sol es un desinfectante natural que ayuda a reducir la humedad y eliminar bacterias. Usa fundas protectoras lavables que añadan una barrera contra el polvo y el sudor, manteniendo el interior de la almohada en mejor estado. De igual manera los sprays refrescantes para telas, que contengan aceites esenciales como lavanda o eucalipto, aportan una fragancia ligera, tienen propiedades antimicrobianas para tener tus almohadas limpias y frescas. Recuerda agitar y esponjar las almohadas con frecuencia para distribuir el relleno y airearlas de manera natural.

Preguntas frecuentes

¿Cómo se pueden eliminar las manchas difíciles de las almohadas?

Aplica bicarbonato y agua o una solución de vinagre y agua tibia directamente sobre la mancha antes de lavarlas.

¿Es posible lavar almohadas de espuma viscoelástica o látex en la lavadora?

No es recomendable, ya que el proceso puede dañar su estructura. Usa un paño húmedo con jabón neutro para una limpieza superficial.

¿Qué temperatura de agua es la más adecuada para el lavado de almohadas?

Usa agua tibia para eliminar suciedad y gérmenes sin dañar las fibras.